Si podemos sacar una lectura positiva de la crisis provocada por el covid—19 es que la solidaridad humana lo ha vuelto a hacer. Como Tarantino. Si necesitábamos pruebas aquí las tenemos, que no solo de fe vive el creyente medio.
Desde el minuto uno las empresas ajenas al sector empezaron a fabricar material de protección sanitaria, las personas se ofrecieron a sus vecinos mayores para hacerles la compra o bajar la basura y los jóvenes dispusieron de su tiempo al cuidado de los más pequeños para así ayudar a esos padres que no podían dejar de ir a trabajar. Luego están las aportaciones logísticas y económicas de las grandes empresas demostrando, de esta manera, por qué son grandes. Hola a la ola de solidaridad.
A mediados del mes de marzo, con el fin de prevenir y evitar la propagación del brote de covid—19, la familia Senttix se sumó a la iniciativa de las numerosas empresas yeclanas que, de manera voluntaria, han colaborado desde el principio en la fabricación de material sanitario. Ante tal situación de emergencia cambiamos nuestra habitual línea de elaboración de colchones por la fabricación de batas sanitarias, fabricando y donando un total de 760 batas repartidas en hospitales de Yecla, Alicante y Murcia y en residencias de ancianos de Córdoba, Elda y Yecla, además de la asociación Astrapaces, Emergencias 112 y Centro de Hemodonación de Sangre de la Región de Murcia. También hemos compartido materiales y patrones de batas y mascarillas con las empresas Fama, Gobik, Cabanes & Ortuño y Davó.
Es lo que teníamos que hacer. Es lo que hemos hecho todos, porque es el compromiso de todos con todos. Estamos convencidos de que el covid—19 pasará pero la solidaridad humana permanecerá, o al menos aparecerá siempre que necesitemos de ella.